Las iniciativas de consumo responsable como espacios de innovación comunitaria y aprendizaje social

Revista de Estudios e Investigación en Psicología y Educación, Extr.(14),

Résumé :

La educación ambiental es un proceso permanente en el cual los individuos y las comunidades adquieren conciencia de su medio y aprenden los conocimientos, los valores, las destrezas, la experiencia y también la determinación que les capacite para actuar, individual y colectivamente, en la resolución de los problemas ambientales presentes y futuros. La educación ambiental es, ante todo, educación para la acción, pues “actúa ampliando nuestros conocimientos y conciencia acerca de los impactos de la actividad humana sobre el medio, pero con el objetivo último de mejorar nuestras capacidades para contribuir a la solución de los problemas”. En este marco, los procesos de participación ambiental han sido definidos como potenciales espacios de aprendizaje social que permiten la comprensión por parte de la ciudadanía, de los procesos ambientales (en conexión con el contexto social, económico y cultural), fomentando actitudes críticas y constructivas, que promuevan procesos de transición hacia estilos de vida sostenibles a través de la acción comunitaria. En España, las organizaciones o grupos de consumo responsable han sido definidos como espacios de innovación comunitaria en los que la ciudadanía se convierte en agente educador y “es el sujeto de cambio” jugando un relevante papel como creadores de nuevos marcos socioculturales que se convierten en referentes para el resto de la sociedad (Suriñac, 2012). En Galicia, comunidad en la que los hábitos de consumo de sus ciudadanos han cambiado radicalmente en los últimos 15 años, ha emergido una red de grupos de consumo responsable y sostenible que, en los últimos cinco años, se ha consolidado y expandido a lo largo del territorio. Este trabajo presentará la primera fase de un estudio cualitativo sobre las asociaciones/cooperativas de consumo sostenible de Galicia, analizando, en primer lugar, el perfil de consumidor/cooperativista y los valores, creencias y motivaciones que lo mueven a participar en una iniciativa comunitaria de este ámbito. En segundo lugar, se estudiarán los diferentes procesos de aprendizaje social generados en dichos espacios colaborativos (“comunidades de aprendizaje”), como resultado de la participación (horizontal e igualitaria) en contextos significativos (Heras, 2007) y que promueven la mejora de competencias sociales, el aumento del conocimiento teórico y la capacidad de resolución de problemas y gestión de conflictos. Finalmente, se indagará en la transferencia del conocimiento y habilidades adquiridas a otras esferas del individuo, coherentes con el desarrollo de estilos de vida sostenibles.

Sources :

Revista de Estudios e Investigación en Psicología y Educación, Extr.(14),DOI: revistas.udc.es/index.php/reipe/article/view/reipe.2015.0.14.316