Green jobs : Empleo Verde en España 2010

2010

Download : PDF (2,9 MiB)

Resumo :

El término de economía verde plantea un nuevo modelo económico en el que las interrelaciones entre las actividades económicas y los ecosistemas naturales sean mucho más explícitas y, así se consideren alternativas que aminoren el impacto adverso de las actividades económicas sobre el medio ambiente y,

de manera especial, sobre el cambio climático y el calentamiento global.

Se ha apuntado también que, a nivel teórico, los principios que originaron el modelo de la economía verde se están viendo ampliados en el marco del desarrollo sostenible para recoger la estrecha relación entre el ámbito económico, el ambiental y el social.

De forma simultánea a los debates de carácter político o academicistas, la economía española, como la mayoría de las economías occidentales, ha iniciado un conjunto de cambios que la sitúan en la dirección del desarrollo sostenible. Estos cambios, que buscan una mayor protección del medio ambiente y una mayor consideración de los aspectos sociales, han estado promovidos por el desarrollo de un amplio marco normativo, y por fuertes

transformaciones sociales (acelerado envejecimiento de la población, urbanización creciente, etc.), y han dado lugar a realidades con una importante dimensión económica. En torno al 13,5% de las personas empleadas en España trabaja en servicios relacionados con la educación, la sanidad o la atención social, tres pilares básicos de la sostenibilidad social

del crecimiento.

Este proyecto constituye un paso adelante en el análisis y cuantificación de las relaciones entre la economía española y el medio ambiente ya que:

1. Aporta magnitudes macroeconómicas necesarias para justificar medidas de cambio en la estructura productiva que permitan una mayor “verderización” (greening) de la economía española.

2. Contribuye a dar visibilidad al avance de la economía verde en el tejido productivo español poniendo de manifiesto la creciente oferta de bienes y servicios –en la industria, en el sector energético, en los servicios más característicos (como la recogida y valorización de los residuos), y en otros más genéricos (servicios de ingeniería o de consultoría, la formación)– ya disponible y el importante volumen de recursos que ya se destinan a la transición hacia una economía verde.